La pirotecnia, a pesar de que para muchas personas resulta divertida, plantea un sombrío telón de fondo para nuestros amigos de cuatro patas. Los estruendosos estallidos y destellos luminosos desencadenan un verdadero tormento sensorial para los animales, cuyos oídos sensibles y agudos sentidos se ven sobrepasados. Estos estruendos, especialmente agudo en mascotas como perros y gatos, puede desencadenar episodios de ansiedad extrema, pánico y, en casos más graves, problemas de salud mental a largo plazo e incluso en algunos casos, la muerte de nuestro animal . Con la finalidad de una coexistencia más compasiva, es necesario reflexionar sobre el impacto nocivo que la pirotecnia tiene en la vida silvestre y doméstica, buscando alternativas que preserven la paz y seguridad de todos los seres vivos.

Como sabemos que es algo muy difícil de erradicar, especialmente por aquellos sectores de la sociedad que carecen de empatía hacia los animales, os dejamos aquí unos consejos en caso de tener que afrontar esta situación.